“Inolvidable"
Autora: Sakura
Pareja: Yamachii
Género: Yaoi,
romance.
Extensión: Oneshot
Nota: Hola!!!! ay lo se despues de meses me reporto en 2015!!!!!!!!!!!!!! D: Lo siento he estado ocupada y sin internet T_______________T no se cuando regrese pero por ahora estoy en varios fics, Yamajimas *w* Yamachi, inoodaii, y eto.... Takachii x3 bueno, a todo esto este es un fic de los quue le debo a mi hermosisima neechan TwT te amu neechan Nina-chan <3 <3 Chuuu~ espero te guste D: No quedo como esperaba pero di lo mejor de mi :DD Se supone seria publicado el 31 -w- del 2014 diciembre pero por motivos grandes no pude pero aqui esta :DD espero les guste, si dejas un comentario me harias feliz >w< Bueno sin mas el fic <3
Desde aquel día en
que por primera vez nuestras miradas se cruzaron supe que serias para mí...
Era un día lluvioso,
lleno de mucha gente en las calles que caminaban a sus casas a toda prisa al
sentir el tacto de la lluvia sobre su cuerpo, era verdad era el último día del
año, de ese horrible y cruel año.
Se detuvo por unos
instantes mirando al cielo sintiendo como esas frías gotas chocaban contra su
rostro cayendo por sus mejillas hasta terminar en el frio suelo, respiro
profundo y volvió su vista a su camino para seguir con este.
-hoy... solo hoy será
el ultimo día y año que te esperare... si no regresas habré aceptado que jamás volverás…
Susurro para sí mismo
dejando salir esas gotas llenas de dolor de aquellos ojos que no mostraban
alguna emoción.
Siguió su camino
siendo empapado por la lluvia, poco le importaba solo quería ahogar su dolor
nuevamente en aquel lugar que aquel chico prometió regresar desde hace ya 3
años.
Unos pasos más y estuvo
allí en aquel solitario parque, donde solo estaban el, y aquella oscura soledad
que lo había acompañado desde que la persona que más amaba en el mundo partió.
Camino unos pasos más
y tomo asiento en aquella fría banca, mientras los recuerdos invadían su mente.
Flash Back-
-3 años atrás-
Tenía la mirada
perdida en aquella pizarra, atento a todo lo que el profesor dictara hasta que
todo fue interrumpido por pequeños
golpes que dieron a la puerta, el profesor se dirigió hacia allá abriendo un
poco.
Al cabo de unos segundos abrió por completo la puerta entrando de allí un
chico de baja estatura.
-El a partir de ahora
será su nuevo compañero, él es transferido de la mejor escuela de todo Tokio, así
que por favor tratarlo bien ya que es un honor que un alumno de esa escuela
este con nosotros.
Dijo el profesor,
para después cederle la palabra aquel chico.
-mucho gusto soy
Chinen Yuri, es un gusto estar con todos ustedes espero llevarme bien.
Pronuncio el menor
con una sonrisa, que por obvio llamo la atención de muchos chicos y chicas.
-Por favor pase a
sentarse en el asiento vacío, que está al lado del Joven Yamada.
El chico solo asintió
pasando a tomar su lugar.
-Hola Yamada-kun,
espero nos llevemos bien.
Le dijo Yuri con esa
sonrisa que hacia brillar su rostro, Yamada solo lo miro con fastidio y volvió
a dirigir su vista hacia la pizarra, el menor lo miro con desconcierto pero no
dijo nada e hizo lo mismo comenzando a tomar apuntes.
En toda la clase
Chinen no dejaba de observar el serio rostro de Yamada, a cada segundo le
resultaba más interesante, no iba a negar que era un chico muy apuesto más que
nada, pero había algo en el que le daba miedo y eso era la forma en que lo miro
por primera vez, en sus ojos había soledad, tristeza, frialdad… pero más que
nada dolor.
Al cabo de unas horas
por fin dio por terminado aquellas largas horas de esa clase tan aburrida para
Yamada, quien se puso de pie guardando todas sus cosas, al momento que salía a
toda prisa de aquel lugar.
Chinen lo observó
partir, pero no iba a quedarse allí tenía que saber más acerca de aquel chico le había llamado mucho
la atención, así que antes de que los alumnos lo comenzaran a rodear hizo lo
mismo saliendo a toda prisa detrás del mayor.
Vio como este subía a
la azotea, algo que no se le hizo extraño ya que el hacía lo mismo en su
anterior escuela, para escaparse de toda esa falsedad de la cual estaba
rodeado, así que subió a toda prisa, cerrando tras de sí la puerta llamando por
obvio la atención de Yamada, quien lo miro con desconcierto y molestia a la
vez.
-¿Quién eres? Y ¿Qué
haces aquí?
Pregunto Yamada con
cierto fastidio en la voz.
-vine siguiéndote.
-eh?
-Si así es, quiero
conocerte…
Dijo Chinen, era la
primera vez que era tan sinceró, ya que pudo haber inventado una mentira del
porque estaba allí.
-ja, eres idiota o qué?
Quien te crees para seguirme?, no tengo ganas de discutir contigo así que solo
lárgate, si no quieres meterte en
problemas.
Bufo Yamada con
molestia, saco su almuerzo y tomo asiento.
-no lo hare, ahora
comprendo por qué estás solo, de esa forma alejas a las personas de ti, quieres
mostrarte ante ellas con algo que no eres, les quieres dar miedo, no es así?
-eso es algo que a ti
no te importa, así que solo vete.
-porque? No lo
entiendo.
-No tienes que
entender nada, odio a las personas tan falsas como tú que fingen preocuparse y
luego solamente te botan como una escoria, así que ya deja de fastidiar y vete.
-odias a las personas
falsas, y te comportas como ellos, porque con la persona que me estas mostrando
ahora es totalmente falsa.
Dijo Chinen elevando
la voz algo que cayó como balde de agua fría en Yamada, como era posible que
ese chiquillo que no sabía nada acerca de él, le estuviera diciendo todo
aquello y más aún que en algunas cosas acertara.
-Tú que vas a saber
de mí, no sabes por lo que tuve que
pasar para ser como ahora soy, no hables de mí si no conoces mi pasado.
-es verdad no conozco
nada de ti, por eso te estoy pidiendo que me aceptes en tu vida para poder
conocerte más… solo pido esa oportunidad..
Pidió el menor con
suplica, Yamada lo miro con fastidio tomando su almuerzo y camino a paso firme
pasando a un lado del menor.
-me gusta estar solo,
así que solo no intervengas en mi vida.
Dijo Yamada para
después seguir su camino cerrando la puerta tras de si. Chinen solo saco un
suspiro lleno de resignación.
-no me rendiré…
-Fin Flash Back-
-Baka, prometiste no dejarme
solo tanto tiempo y no lo cumpliste… porque no solo me dejaste que me hundiera
en mi soledad quizá todo habría sido más fácil… jamás habría que pasar por este
horrible dolor.
Su voz comenzó
nuevamente a quebrarse mirando como las calles comenzaban a vaciarse, quizá
solo esperaría nuevamente algo que nunca iba a regresar, faltaban 20 minutos
para que el año acabara y con él todas sus esperanzas.
Se puso de pie
dispuesto a marcharse cuando de pronto callo de su cuello un pequeño dije, lo
recogió bajando con debilidad la mirada.
-debo esperarte un
poco más… como tú lo hiciste conmigo…
Susurro para sí mismo
recordando el día que cambio su vida-
Flash Back-
Se encontraba
recostando sobre la banca que se encontraba en la azotea, sintiéndose sumamente
calmado y tranquilo hasta que esa odiosa voz lo saco de todo pensamiento
enderezándose un poco solo para ver al culpable de todo ese alboroto.
-Hola Yamada-kun,
mira lo que traje, me han dicho que sabe delicioso ¿quieres un poco?
-Cuantas veces te
tengo que decir que no vengas a molestarme aquí también, suficiente tengo con
que seas mi compañero de clase y lo peor de todo que estés junto a mi todo el
tiempo.
Respondió Ryosuke con
fastidio, era verdad ya había pasado rápidamente un mes desde que aquel chico
fastidioso entro, y la mayoría del tiempo estaba cerca de Ryosuke aunque se lo
hubiera prohibido totalmente, no hizo caso. Era todo lo contrario se la pasaba
pegado a é, la mayoría del día a donde fuera allí estaba y peor aún ya se
estaba acostumbrando a su tan odiosa compañía.
-es que estar al lado
de Yamada-kun se siente tanta calidez.
Le dijo con una
sonrisa, Yamada lo miro con desconcierto y solo se volvió a recostar mirando al
cielo.
-No entiendo porque
sigues cerca de mi cuando te trato de esa forma.
-porque eres honesto,
no finges y eso es lo que me gusta de ti.
-eh?
Volvió a enderezarse
mirando al menor con extrañeza quien lo
miraba regalándole una sonrisa.
-sabes quién soy?,
como es mi vida? No verdad, entonces no digas que me conoces cuando no sabes
nada de mí.
-no lo se, pero tu
forma de ser me hace pensar que has sufrido mucho, por eso te gusta estar solo.
Dijo chinen con
firmeza, Yamada solo caso un suspiro.
-Sabes tan siquiera
porque los de nuestra clase no se juntan conmigo?
-sí, he preguntado…
me han dicho que eras un chico muy dulce, tierno, sociable, pero más que nada
muy amable, hasta que de un momento a otro cambiaste, te volviste serio,
callado, te alejaste y comenzaste a
meterles miedo, por eso ahora te temen y se alejan de ti.
-hmmm… es verdad,
pero no te contaron el porque me volví así no es verdad, como siempre siendo
tan falsos, por eso los odio.
Bufo Yamada con
coraje.
-entonces dime tu,
quiero ayudarte… déjame ser yo quien pueda estar cerca de ti..
Le dijo Chinen
acercándose para tomar sus manos, Yamada se puso de pie alejándose con rapidez
del menor, al momento que le daba la espalda.
-no, me gusta mi
soledad no necesito de nadie y mucho menos de riquillos como tú.
-No me juzgues si no
me conoces, al menos dame esa oportunidad
Pidió Chinen.
-Yo no tengo padres,
mi padre nos abandonó a mi madre y a mi cuando recién nací… mi madre también lo
hizo porque fui un estorbo en su vida, un día cuando desperté hace 2 años para
ir al colegio, había una nota en el comedor donde me dejo un poco de dinero,
decía que ella ya había formado una vida con otra persona, pero que a mí no me
podía llevar con ella, solo sería un estorbo. Sabes que sentí en esos momentos!!!!
Sabes el dolor que tuve que pasar porque mi madre fue lo único que me había
mantenido vivo y feliz, solo por ella quería salir adelante y dale lo mejor!
Pero para ella no fue así, ella… se fue sin importarle si algo me pasaba… a
ella ni a nadie le importo!!!!!! Por eso no me importa nadie le cerré el
corazón a todos! Ahora que lo sabes puedes reírte no me importa, solo aléjate
de mí..
Dijo Yamada con voz
fría pero que en cualquier momento se podía quebrar, Chinen se quedó callado no
sabía que Ryosuke hubiera sufrido tanto, no tenía palabras de aliento.
-yo…
-No digas nada, no
necesito la lastima de nadie!
Dijo Yamada con frialdad
sin decir más paso a un lado del menor, pero antes de salir sintió unos
pequeños brazos rodear su cintura.
-No, no me pidas que
me aleje de ti, porque no lo hare!!! Déjame ayudarte, quiero estar contigo…
-no.
Dijo Yamada
soltándose al instante que salía.
-No me voy a rendir,
yo… esperare el tiempo que sea necesario para que me aceptes!!!!
Grito Chinen con fuerza.
-no permitiré que
nadie invada mi espacio, no quiero volver a sentir dolor nunca más…
Susurro Yamada para sí
mismo siguiendo su camino.
Fin flash back-
-Nunca te rendiste,
hasta que lograste entrar en mi corazón, algo que yo no podía asimilar, no podía
aceptar que alguien había traspasado mis barreras, me fue difícil pero al fin
acepte que entraras en mi vida, en aquella fría y sola vida, a la cual tu
llenaste de sonrisas, luz, alegría pero más que nada conocí por primera vez lo
que era amar, y sentirse amado, había encontrado el motivo por el cual luchar…
Cerro los ojos
viniéndose a su mente aquel recuerdo donde Chinen confeso aquellos bellos
sentimientos.
***
Su vista estaba fija
en aquella puerta esperando la llegada de aquella persona, de su fastidio que
de un tiempo para otro se convirtió tan indispensable su presencia, se había acostumbrado
mucho a él. Sabia a la perfección que no debía dejar que nadie invadiera su espacio
pero no hizo caso y ahora estaba pagando las consecuencias-
-Si, al parecer
Takaki Yuya, el chico apuesto, le gusta Chinen Yuri! No puedo creerlo se supone
que yo sería la novia de Yuya Sempaii
-Y yo de Chinen-kun .
Yamada escuchó
atentamente lo que iban comentando aquellas dos compañeras de su clase,
quedándose helado, algo dentro de sí dolió, sin más se puso de pie dirigiéndose
a esas chicas, parándose frente a ellas.
-Han visto a Chinen?
Pregunto Yamada con
esa voz fría de siempre, las chicas lo miraron con temor.
-Hai, estaba con
Takaki sempai, en el jardín trasero.
Respondió la chica
ruborizada y a la vez con miedo, Yamada no espero más y salió a toda prisa.
Sus pasos comenzaron
a ser torpes, su respiración se volvió irregular incluso sintió como si le
faltase el aire, su corazón comenzó a doler de una forma que jamás había
sentido, unos pasos más y estuvo cerca, visualizando rápidamente al menor
retrancado a la pared y otro chico castaño muy cerca de él, sus piernas no se
movieron, sintiendo esa impotencia de no poder hacer nada.
-lo siento… yo estoy
enamorado de alguien más…
Dijo Chinen zafándose
del agarre de Yuya.
-no, no me digas eso…
yo en verdad te amo, dame una oportunidad…
Pidió Yuya con
suplica.
-no puedo engañarte…
no podría hacerlo…
-Quien?
-eh-
-Quien? Quien es el
que me quito la oportunidad de entrar en tu corazón.
Pregunto Yuya con la
voz quebrada, Chinen lo miro con tristeza al mismo tiempo que bajaba la mirada,
lo que menos deseaba era causar dolor alguien.
-Es Yamada Ryosuke…
el chico que tiene la suficiente fuerza para no rendirse, así nadie lo apoye…-
Respondió Chinen con una débil sonrisa
-Que dijiste?
Dijo Yamada por fin
acercándose hasta donde Chinen, quien lo miro sorprendido, Yuya supo que ahora él,
era quien sobraba no podía mandar en los sentimientos del menor, solo bajo la
mirada retirándose de aquel lugar, con un corazón destrozado.
-Yo… lo siento pero
no pude evitar enamorarme de ti…-Chinen pronuncio con debilidad al instante que
bajaba la mirada.
Yamada sintió su
corazón latir con demasiada fuerza, que era lo que significaba acaso también estaba
enamorado de chinen? Se preguntó así mismo mirando a Chinen quien tenía la
mirada baja.
-Porque? No lo
entiendo…
-eh?
-porque yo?, que tengo
de interesante, soy frio, no me gusta que las personas estén cerca de mí, te he
tratado mal… no tengo familia, no hay nada que pueda hacer por ti…
-Estas equivocado,
para mi tu eres la persona más linda que existe en el mundo, eres sincero, sin fingimientos,
tienes el corazón más cálido y hermoso que pudiera existir, haces que cuando
alguien este a tu lado se sienta el ser más feliz de la Tierra… por eso yo
estoy enamorado de ti…
Respondió Chinen con
firmeza, Yamada lo miro con asombro era la primera vez que alguien le decía
algo así, bajo la mirada entre feliz y triste.
-perdóname… pero yo
no puedo corresponder a tus sentimientos…
-no me importa yo
luchare por enamórate…
Grito chinen con esa
fuerza y la alegría que lo distinguía.
-Idiota…
Susurro Yamada
ruborizándose, pero a la vez feliz. Era la primera vez que sentía que le
importaba alguien.
***
Miro su reloj, eran
las 11:58 faltaban tan solo 2 minutos para que el año diera por terminado, los
gritos de las personas comenzaron a oírse, todos lucían felices y emocionados
por llegar al 2015, algo que en una persona le causaba dolor pues tal vez no
llegaría nunca ese “nos volveremos a ver, lo prometo… solo espérame.” De aquel chico que había estado esperando
desde hace ya 3 años.
****
Tenía la mirada
perdida en aquellos ojos, sabía que en cualquier momento iba a desplomarse, por
más que no deseaba que el menor lo viera así no iba a poder ocultarlo.
-No quisiera dejarte
y lo sabes, pero mis padres me obligaron… pero te prometo por el amor que nos
une que yo regresare en un año, prometo regresar para hacer mi vida contigo…
Pronuncio Chinen
acariciando con delicadeza la mejilla del mayor quien la tomo depositando un
beso.
-no puedo retenerte…
pero no rompas tu promesa porque es lo único que me mantendrá vivo mi pequeño…
Respondió Yamada
abrazando con fuerza aquel pequeño que había robado su corazón por completo,
había logrado traspasar aquellas barreras que se interpuso. Chinen solo correspondió
abrazándolo con la misma fuerza.
-no es un adiós, es
un hasta pronto porque definitivamente nos volveremos a ver… lo prometo… solo
espérame…
-te esperare el
tiempo que sea necesario…
Respondió Yamada
tomando el rostro de chinen al mismo tiempo que lo sellaba con un beso lleno de
una dolorosa despedida, pues sería el último hasta su rencuentro.
****
-Te espere porque
siempre confié en ti… pero si sigo así solo acabare lastimándome más…
Susurro con pesar,
miro al cielo notando como comenzaron a tronar todos aquellos fuegos
artificiales, por fin había acabado el año, suspiro girando pero no había nadie
nuevamente, sonrió con debilidad sabía que era hora de marcharse, ya era tiempo
de olvidar para siempre algo que ya no regresaría.
Se dio media vuelta
para emprender el camino de regreso a casa, seco sus lágrimas y comenzó su camino.
-¡Ryosuke!!!!!!!
Se escuchó una voz a
sus espaldas, una voz demasiado familiar, aquella voz que por un tiempo se
convirtió en tan solo una ilusión mas, suspiro y negó sabía que quizá
nuevamente todo era producto de su imaginación.
-No te vayas!! Yo
regrese solo por ti, por favor no me dejes…
Esas palabras
penetraron en su mente como un rayo de luz, sabía que eso ya no era una ilusión
era real, se giró encontrando a unos metros lejos de él, aquel chico que espero
por más de tres años.
-Yuri…
-Regrese, mi
Yama-chan … regrese por ti…
El corazón de Yamada
comenzó a latir con fuerza, lentamente se acercó, estaba ligeramente nervioso,
sus latidos se aceleraban más y más.
-¿Qué… que haces
aquí?-
Preguntó entre triste
y feliz.
-Cumplo con una vieja
promesa-
Respondió con una
tierna sonrisa. Yamada lo miró sorprendido.
-¿Tu… tú eres Chinen?
¿En verdad eres tú?-
Chinen solo asintió
con la cabeza mientras sonreía, y sin poder contenerse más, Yamada caminó de
prisa, y abrazó a Chinen con fuerza, el cual respondió a aquel cálido abrazo
con fuerza.
-Perdóname… yo…
-Eso ya no importa,
estas aquí…-
Le dijo Yamada al
oído mientras lo abrazaba tiernamente, Chinen se acurruco en su pecho
disfrutando nuevamente de su calidez.
-no sabes lo mucho
que te necesite mi pequeño…
Dijo Ryosuke mientras
se alejaba un poco. Chinen acarició el rostro de Ryosuke y dijo con voz suave.
-Te amo-
Ryosuke se ruborizó
de inmediato, y antes de poder decir o hacer algo, pudo sentir los labios de
Chinen sobre los suyos, un poco sorprendido, se quedó inmóvil por unos
instantes, reaccionando al mismo tiempo que correspondía con esa calidez y
dulzura, en la que se mostraba que lo había extrañado demasiado.
-Te amo Yuri-
Susurro Yamada entre
besos, chinen solo sonrió volviendo atrapar los labios de Ryosuke en aquel
dulce beso, ambos abriendo lentamente sus bocas, haciendo de aquel beso más y
más profundo, moviéndose a un solo ritmo, suave y lento.
Al separarse Chinen
dijo.
-Siento mucho que
hayas esperado tanto tiempo-
-Eso ya no importa,
aquí lo único que importara es que te quedes a mi lado en este 2015 que
comienza-
Dijo Yamada con una
sonrisa.
Chinen bajó
tímidamente la mirada asintiendo, Yamada tomó su rostro con ambas manos y
volvió a besarlo tiernamente.
-Gracias por
regresar-
-Gracias por esperarme
tanto tiempo-
Ambos sonrieron
tomándose de las manos juntando sus frentes, era tanto el tiempo que se habían
hecho tanta falta, pero sabían que estando juntos el pasado quedaría atrás para
iniciar un nuevo presente para construir un nuevo futuro juntos, quizá pasaron
tres largos años sin verse pero eso solo hizo de aquel lazo, que un día los unió
se hiciera fuerte, porque un amor como el de ellos dos era difícil de romperse,
ahora solo esperarían un 2015 para comenzar a escribir aquella historia que
nunca tuvo un final, solo el comienzo de su historia donde Yamada Ryosuke y
Chinen Yuri sabían su forma de amar, después se contarían por lo que pasaron
ahora solo importaba el momento juntos.
Fin…
