“Nos volvemos a
encontrar”
Autora: Sakura
Pareja: Yamajima
Género: Yaoi, Romance, lemon)?
Extensión: TwoShot
Nota: Hola :DD como estan, bueno pues yo aqui pasando a dejar algo en el blo que por cierto quedo muy kawaii, se lo deje a una amiga que me lo mejorara y bueno quedo hermoso, juro que me ha encatado T_T amo que me hagan estos detallitos, Neechan hermosa Amy-chan Gracias, Gracias me ha facinado. Pasando a lo otro hace no mucho conoci a mi adorada y hermosa escritora favorita, bueno una ya que fue su blog el primer fic que me lei Yamajima y me enamore de alli de esa pareja, ya que he de confesar que amaba el Yamachi D: Jejeje por eso tambien lo leo, jeje en fin este fic que no tengo mucho escribiendolo se lo dedico a Hitomy-chan *------* ella es la persona de la que les hablo, T_T me hizo muy feliz con sus fics y porque ama el yamajima, asi que espero te guste hermosa neechan :DD -
Nota: 2 Este fic salio leyendo mis locuras de hace añitos cuando recien comenze con el blog xD, y relei algunos fics T____T me sorprendi al leer un Yamajima separado, no no me gusta cuando quedan separados asi que por eso, me vinieron ideas algo no comun en mi, y surgio esto :D iba a ser un oneshot, pero bueno me quedara mas largo asi que se convertira en un Twoshot, casi acabo la segunda parte ccuando la tenga la subo, :D a todas las personitas que leen Gracias sus comentarios me animan, y bueno Nina hermosa casi acabo tu fic, neechan espero pronto subirlo :D sin mas el fic.
PD; Es como si fuera la segunda parte de este Oneshot: "Nunca te olvidare" si quieres entenderle bueno lee primero ese :D
El destino me separo de lo que
alguna vez ame…. De la forma más cruel, no pensé que volvería a verte pero
ahora que te tengo nuevamente frente a mí,
no sé qué hacer para que te acuerdes de la promesa que un día me hiciste… y más
que nada que me recuerdes…
Caminaba a paso apresurado, era
su primer día en aquel colegio, se encontraba nervioso, feliz, asustado, pero más
que nada entusiasmado por su primer día de clases, por fin había logrado entrar
aquella prestigiosa escuela, por una beca otorgada por sus buenas notas, realmente
se sentía feliz.
-Ryosuke, y que opinan tus padres
de que te has venido a vivir solo?
Pregunto el chico que venía a su
lado.
-Ellos saben que no deseaba dejarlos
solos, pero por la misma cusa de ayudarlos a que tengamos una mejor vida, tenía
que venir a estudiar, y no podía desperdiciar esta gran oportunidad que se me está
ofreciendo y mucho menos en la Universidad soñada por muchos.
-Entiendo, eres un gran hijo me
imagino tus padres deben estar felices de tenerte.
-Gracias, igual lo mismo digo
para ti Inoo-chan.
Sonrió leve, el mayor lo miro
negando.
-Sabes que no es así, mi padre
nunca estará orgulloso de mi, el desea que algún día maneje su empresa y yo no
quiero, amo la música y quiero ser un gran pianista, mi padre no está de
acuerdo además que su mayoría de tiempo se la pasa fuera del país, y mi madre
con sus amistades, si no te hubiera conocido aquella vez, te aseguro que me
seguiría amargando mi vida, desde que te conocí mi vida cambio radicalmente
dándole un motivo a mi vida, por ti supe que si tengo un sueño debo seguirlo y
no deprimirme solo porque mis padres no me prestan la mínima atención, no sabes
lo feliz que fui cuando supe que vendrías a mi Universidad a estudiar. Gracias
Ryosuke por ser mi amigo.
Yamada se ruborizo, regalándole
una sonrisa a Kei quien correspondió de la misma forma.
Así siguieron su camino, hasta
llegar a la entrada de aquella gran universidad, Yamada solo sonreía asombrado jamás
pensó pisar siquiera aquella gran escuela, todo era perfecto en aquel lugar, de
no ser porque salió el portero anúnciales a todos los alumnos que iban entrando
que se hicieran a un lado, todos obedecieron formando una tipo valla a los
lados de la entrada, Inoo jalo suavemente a Ryosuke a un lado.
No tardo mucho y una limosina
paso, miro con asombro como todos los estudiantes que se encontraban allí
hacían una reverencia, quedándose más que sorprendido, de pronto esta se paró justo en el lugar de Ryosuke quien salió
de todo trance al notar que todos lo miraban.
-Se puede saber porque no te
reverenciaste como los demás?
Pregunto un hombre desde adentro
de aquella lujosa limosina.
-eh… ¿yo?
Pregunto Yamada con cierta torpeza,
iba a responder pero Kei se adelantó.
-Me disculpo por él, es nuevo y
no sabe nada sobre las reglas de la escuela aun, yo me encargare de explicarle
todo.
-Ya veo, si es así no hay
problema, pero que no vuelva a suceder.. Joven Inoo
-Sí, Sr. Nakajima.
Hizo una reverencia, y así la
limosina siguió su camino adentrándose al colegio, Yamada solo observo atónito mirando
con curiosidad aquella lujosa limosina en la cual iba el chofer, aquel hombre
de hace un momento y ms aparte iba un chico, pero no pudo visualizar bien su
rostro porque este llevaba unas gafas oscuras.
Estaba sumergido en sus
pensamientos hasta que la voz de Kei lo saco de estos.
-Ryosuke, estas bien?
-eh… sí.
-No te preocupes, no pasa nada yo
me encargare de explicarte todo.
Le sonrió, Yamada se tranquilizó
y siguió camino junto con Kei, pero al cabo de unos minutos tuvieron que separarse ya que cursaban en distintos
grados y carreras.
Yamada caminaba en busca de su
salón, y nuevamente miro como todos los chicos que se encontraba por ese camino
hacían una pequeña valla, el solo se quedó en medio del pasillo parado al
observar como un chico de alta estura, cabello negro, delgado, bien vestido y
por más que obvio elegante, mentiría si dijera que no era atractivo, no podía
observar su mirada por las gafas oscuras, ese chico lo había visto antes en
aquella limosina, ladeo un poco la cabeza aun sin entender nada.
-Me das permiso, por favor?
Una voz lo saco de todo trance,
quedándose paralizado al notar que ese chico se encontraba frente a él, inmediatamente
noto que se encontraba en medio del pasillo, reacciono rápidamente al momento
que se hacia un lado ante la atenta mirada de todos los que se encontraban
allí, se disculpó con torpeza.
-Gracias.
Dijo aquel desconocido sonriendo
leve, sin decir más siguió su camino ante la atenta mirada de todos los alumnos
que lo miraban como si de un Ídolo se tratara, Yamada suspiro más tranquilo por
un momento pensó que se ganaría una mala contestación o peor que tendría problemas
desde el primer día, ya que al parecer ese chico era alguien importante.
Siguió su camino, hasta que
después de unos minutos más dio con el cual era su salón, para su buena suerte
aun el profesor no había llegado, sonrió aliviado y con tranquilidad tomo
asiento en una butaca disponible.
-Hola, supongo debes de ser
nuevo? Nunca te había visto.
Dijo un chico de pequeña
estatura, que se encontraba sentado a un lado.
-Ah? Sí, soy Nuevo, me llamo
Ryosuke Yamada mucho gusto.. Espero nos llevemos bien.
-Soy Yuri, Chinen Yuri, te
aseguro que nos llevaremos bien.-le sonrió leve-
Al cabo de unos minutos Yamada y
Chinen se encontraban platicado animadamente, hasta que la voz del que sería su
profesor lo saco de ellos, haciendo que todos los alumnos ocuparan sus
respectivos lugares, y así comenzar con su clase.
Yamada ponía atención a todo lo
que el profesor decía y explicaba, para el todo era regalado pues ya lo había
visto en su antigua escuela, era como un repaso quizá por ser el primer día de
clases, Chinen solo miraba con atención a Yamada, lucia tan lindo concentrado
en lo que hacía, sabía que era extraño pero desde que lo vio entrar por la
puerta del salón llamo su atención, era tan diferente a todos los que se
encontraban allí, él era sencillo, comprometido, respetuoso, humilde, tierno,
dulce, tranquilo serio, alegre y no iba a negar que era demasiado atractivo,
necesitaba saber más acerca de ese chico, ya que a Chinen Yuri cuando alguien
le interesaba no estaría conforme hasta que obtuviera lo que deseara.
Al cabo de unas horas por fin sonó
el timbre de hora de receso, Chinen estiro los brazos parándose para ir a ver a
Yamada quien se encontraba guardando sus cosas.
-Te parece si desayunamos juntos?
Pregunto chinen con una sonrisa,
Yamada solo asintió.
-sí, pero antes tengo que ir a
buscar a una persona, me acompañas?
Chinen solo asintió y así ambos
salieron del salón, después de unos minutos Yamada logro visualizar a la
persona que estaba buscando.
-Inoo-chan!!!
Grito Yamada llamando por obvio
la atención del pelinegro quien se acercó corriendo hacia donde se encontraba
el menor.
-Ryosuke, pensaba ir a buscarte a
tu salón, pero por lo que veo ya tienes quien te guie.
Sonrió desanimadamente, Yamada no
se percató de este pequeño detalle.
-No te preocupes, él es Chinen
Yuri, un compañero de mi clase, él fue el que me trajo hasta aquí.
-Gracias por ayudar a mi amigo-
Fingió una sonrisa, Chinen solo sonrió.
-Me callo bien Yama-chan, así que
no tienes nada que agradecer hmmm cómo te llamas?
-Inoo kei.-Respondió con algo de
fastidio, al escuchar que nombraba a Ryosuke con tanta familiaridad.
-Bueno ya que se han presentado
les parece si vamos a comer algo, muero de hambre.
Dijo Ryosuke mirándolos con
suplica, los otros dos solo asintieron y así comenzaron su camino hacia la
cafetería.
Pronto se encontraban en la fila para
pedir su comida, Yamada sonreía con alegría, amaba la comida en verdad tenía
mucha hambre. Al cabo de unos minutos por fin le toco su turno, miro con
atención lo que había y pidió un pan relleno de fresa, con un jugo.
De pronto un vago recuerdo
apareció en su mente.
“-Arigato……..sabe delicioso es de
fresa.”
Nuevamente se había sumergido en
sus pensamientos hasta que una voz lo saco de ellos, era aquel chico de la
mañana pero no solo eso, su voz era tan parecida a la de sus recuerdos.
-Me da un pan con fresa y un
jugo.
-Eh, solo queda uno y este chico
lo pidió, pero no hay problema si es para usted lo que pida.
Dijo el que atendía, Yamada solo
observo esto con curiosidad de verdad ese chico debía ser demasiado importante
para pasar hasta enfrente cuando la fila era larga y aparte de que sin pedirle disculpas
o permiso le dieron lo que había pedido que ya era de él.
-oh, así que ya lo pidió.-Dijo
aquel chico con una sonrisa, lo pago y se acercó a donde Yamada, entregándole
el pan y jugo, asombrando a todos los que se encontraban allí.
-¿Eh?...
-Es tuyo, ya lo habías pedido
antes…
Pronuncio el alto con una sonrisa
por más que hermosa, no tardo mucho y comenzaron los murmullos que alababan
aquel chico como si de un ídolo se tratase, Yamada parpadeo un par de veces y
solo atino a dar las gracias y retirarse de allí.
El alto solo pido un café para
después marcharse de allí con ese aire tan fresco y elegancia que tenía.
Pronto sus dos amigos tomaron
asiento junto a Yamada quien miraba a los alumnos con miedo, al tener la mirada
de todos sobre él.
-No te preocupes Ryosuke, esto
siempre pasa cada que Nakajima es amable con alguien.
Dijo Kei dándole leves palmaditas
a Yamada, quien aún no entendía nada.
-¿Nakajima?
-Es verdad aun no sabes quién es
Nakajima Yuto, él es el hijo del dueño de esta Universidad, su padre es uno de
los más grandes millonarios de todo Japón, mas aparte de que al parecer ese
chico tiene una gran amabilidad, ayudado a muchos estudiantes por eso es que
muchos lo ven como lo máximo, yo no le encuentro nada de interesante.
Explico Kei, dándole una mordida
a su sándwich
-Bromeas, él es el chico más
soñado por cada uno de los alumnos, si porque aunque sea una escuela de
varones, muchos están enamorados de él, por su grandiosa forma de ser, es
atento, respetuoso, lindo, cariñoso, seductor, es amable, guapo y más que nada
no es engreído, por eso es apodado el “Príncipe”, es muy difícil que alguien se
le acerque, son muy pocos los que están a su lado, y solo son personas de su
misma clase social, por eso cuando el se acerca alguien es muy sorprendente y más
que nada raro, porque para estar cerca del Príncipe se necesitan muchas cosas,
es tan anhelado para muchos.
Corrigió Chinen como chico
enamorado, Yamada solo escuchaba con atención sin en cambio eso por
alguna
extraña razón sentía que conocía a Yuto, o por lo menos ya lo había visto
antes, quizá fue en un reportaje o algo por el estilo ya que es famoso.
Pensó esto último negando mentalmente
y así comenzar a comer de su desayuno.
Después de un buen desayuno,
caminaban por los alrededores del colegio, Inoo contándoles por cómo eran las
reglas de aquella escuela y Chinen solo corregía si algo le faltaba, Yamada
solo escuchaba atentamente, pronto el receso termino indicando hora de regresar
a clases.
-Yama-chan ahora te alcanzo iré
al baño-
Dijo Chinen, Yamada solo asintió
y siguió su camino de regreso a su salón, todo hubiera seguido normal de no ser
porque algo llamo su atención, ese chico, el tal Nakajima se encontraba
recostado sobre el pasto, aun con esas oscuras gafas.
-y si está enfermo…
Pensó Yamada preocupado, se acercó
un poco arrodillándose hasta estar lo suficiente cerca del alto, todo hubiera
salido bien de no ser porque nuevamente un recuerdo lo atormento.
-“Me alegro que este Yama-chan
para despertarme…”
Una imagen borrosa apareció entre
ese recuerdo, un chico recostado en una banca frente a él, no lograba verlo
bien y esa voz tan calmada y suave se le hacía tan familiar, que significaba
eso.
-¿Se te ofrece algo?
Esa voz nuevamente, negó
rápidamente saliendo de todo trance quedándose paralizado al ver a ese chico
sin aquellas oscuras gafas, muy cerca de su rostro.
-eh..
Trago saliva, perdiéndose
nuevamente en aquellos orbes negras, aquel hermoso mirar era algo tan nostálgico
sin saber el porqué, su corazón comenzó a latir desesperadamente al momento que
sus mejillas se tornaba de color rojizo.
-si quieres decirme algo, hazlo
pero podrías alejarte un poco…
-¿eh? Lo siento!!!
Dijo Yamada al reaccionar
alejándose lo antes posible, Nakajima solo sonrió enderezase un poco.
-ahora si me dirás porque estabas
tan cerca mío, acaso te gusto?
Pronuncio Yuto de manera
seductora, Yamada solo bajo la mirada avergonzado realmente ni el mismo sabia
porque se encontraba allí.
-Yo… solo quería agradecerte por
lo del pan de fresa, solo eso.
-ah? Ya veo, no tienes porque me
da igual, hubieras sido tu u otro haría lo mismo todos son iguales.
Respondió Yuto con indiferencia,
Yamada se quedó mirando con curiosidad al alto.
-iguales? De que hablas
-eso es algo que no te importa,
en fin si no tienes nada más que decirme puedes irte, quería dormir pero tu viniste a fastidiarme el
descanso.
Dijo Yuto con fastidio, Yamada
solo se quedó sin entender nada, como
era posible que estuviera hablando con un chico demasiado diferente al que vio
hace unas horas, este era arrogante y prepotente todo lo contrario al chico que
sus amigos le habían descrito, como era posible que una persona cambiara tan
drásticamente de unas horas a otras, o acaso este era el verdadero Yuto
Nakajima.
-¿Que?
-Acaso eres tan torpe, o me
quieres hacer enojar? Te acabo de decir que si ya no tienes nada más que decir podrías
largarte de mí vista, entendiste o quieres que te lo explique letra por letra,
idiota.
Respondió yuto con molestia, sin
decir más se puso de pie comenzando a caminar, Yamada no podía reaccionar aun,
su impresión fue bastante.
-Por cierto no le digas de esto a
nadie, no te conviene
Dijo Yuto girándose al momento
que le regalaba una sonrisa por más que falsa, sin decir más siguió su camino.
-así que este es el verdadero tu…
Susurro Yamada con debilidad y
molestia, lo que más odiaba eran las personas falsas y ese riquillo lo era, ya
parecía demasiado fantasioso que el hijo del dueño que no carece de nada fuera
una noble persona, que ilógico ahora Ryosuke tenía que estar más que alerta y
andarse con cuidado con ese Nakajima no deseaba tener problemas y mucho menos
con él, lo mejor era mantener distancia.
-Que idiota fui, por un momento
me deje envolver…
Pensó, sin decir más se giró y
siguió su camino a su destino.
****
-Que? Que hiciste qué? Pero como
se te ocurre?
Grito con asombro, Yuto solo rolo
los ojos con fastidio.
-Ya te dije, que no sé porque?
Pero no pude fingir ante ese tonto, así que fui grosero.
-Valla valla, ja ja ja rompiste
tu reputación de “Príncipe amable”
Rio a carcajadas, Yuto lo miro
con molestia, se supone que le conto para que lo ayudara a idear un plan en cómo
hacer para que ese tonto no hiciera algo en su contra, o tratara de manchar su
nombre. Si era verdad ni el mismo sabia porque se había comportado de esa forma
con ese chico, solo que en ese momento se encontraba de mal humor y justo el
llego en esos instantes, pero aun así no pudo fingir, no pudo.
-y que harás?
-no lo sé Takaki, por eso venía a
pedir un consejo pero eres más inútil que otra cosa.
-oye tranquilo, que hayas
manchado tu solito tu reputación no es problema mío, hmmm porque simplemente no
le dices a tu padre que lo saque de este colegio.
-eso es lo que pensé en un
principio, pero creo que me puedo divertir un rato antes de hacer eso, por
ahora solo lo mantendré vigilado y cualquier cosa que haga mal lo podre
utilizar en su contra-
Respondió Yuto con una sonrisa
llena de malicia, Yuya solo lo miro con miedo.
****
Por fin después de largas horas,
la clase dio por terminado, enseguida Yamada se puso de pie guardo sus cosas y salió
rápidamente, Chinen corrió para alcanzarlo.
-espera! Yama-chan
-eh? Chinen, perdón es que Inoo
me está esperando en la entrada.
-no te preocupes, vamos.
Yamada solo asintió y así ambos
continuaron su camino hacia la entrada del colegio, sin saber que alguien no
muy a lo lejos los espiaba.
-Pareces acosador tras ese arbusto
-cállate Takaki, si no me vas
ayudar mantente callado!!!
Bufo Yuto con molestia, Takaki solo
saco un suspiro.
Inoo y Yamada caminaban en silencio
hasta que uno de los dos se cansó de esto y decidió romperlo.
-Ryosuke, estas bien? Has estado
muy callado.
-eh? No solo que… no nada, estoy
bien gracias por no dejarme regresar solo.
-no es nada, sabes que siempre estaré
para apoyarte.
Le respondió Kei con una sonrisa,
Yamada solo sonrió. No tardo mucho y por fin llego a su departamento después de
despedirse de Kei, entro cerrando la puerta tras de si.
-Veamos, que haremos primero, ya
se desempacare y después me hare algo de comer, pero primero descansare un
rato.
Dicho esto tomo asiento en el
sofá y al cabo de unos minutos se encontraba profundamente dormido.
-“Porque
te tienes que ir….
-Porque
quiero iniciar una nueva vida a tu lado..
-Una
nueva vida conmigo… estás hablando enserio?
-hai,
nunca he hablado tan seriamente como hoy, quiero comenzar una nueva vida pero a
tu lado mi Yama chan.
Respondió
abrazando a Yamada con fuerza para después posar sus labios con delicadeza.
Después
de unos minutos se separaron con las mejillas ruborizadas
-pero
prométeme que vas a regresar, y que te vas a cuidar.
Dijo
soltando todas aquellas lágrimas que amenazaban por salir.
-te
prometo regresar, porque te amo, no llores no voy a morir, ya que aquí tengo
todo lo que me hace feliz… “
Abrió los ojos, suavemente
tocándose las mejillas al sentir algo húmedo y cálido rodar por estas.
-estaba llorando?
Se preguntó sorprendido,
recordando el sueño que acababa de tener, no lo recordaba bien solo que se
encontraba frente alguien, si no estaba mal era un chico pero no pudo recordar
su rostro, solo podía recordar esa voz tan tranquila y hermosa, la cual se le hacía
tan familiar.
-Que significa… ¿quién es? Porque
no puedo recordar su rostro, porque estaba llorando..
Susurro para sí mismo con debilidad, se puso de pie asombrándose al
notar que ya estaba oscuro, cuanto tiempo había dormido ni el mismo lo sabía, saco
un pesado suspiro dirigiéndose a la cocina para prepararse algo de comer.
Al termino de unos minutos, se encontraba
cenando, era extraño se sentía solo realmente solo, siempre cenaba con su familia y ahora lo haca solo, muy dentro
los extrañaba, no le gustaba la soledad, pero tenía que acostumbrarse esa iba a
ser su vida a partir de ahora.
Después de una calmada cena, lavo
sus trastes y se dirigió a su habitación se recostó no tardando mucho y
nuevamente se sumergió en un profundo sueño.
A la mañana siguiente se levantó,
tomo rápidamente una duche y sin desayunar salió corriendo al colegio, se le
hacia demasiado tarde, al fin acabo de pesados minutos logro llegar y por
suerte su profesor aun no entraba.
-Ohayou Yama-can, oh ocurre algo?
Luces agotado
Saludo chinen con una sonrisa,
Yamada solo recostó su cabeza en su pupitre mirándolo con debilidad.
-no es nada, solo que me quedé
dormido y por poco llegaba tarde.
-Ya veo-
Respondió el menor con una
sonrisa, de no ser porque el profesor entro, Chinen haría lo posible por
sacarle toda la verdad.
Por fin de largas horas de trabajo
llego el receso, Yamada y chinen salieron en busca de Kei, quien que ya los
esperaba a unos pasos de su salón. Así los tres se dirigieron a la cafetería,
Inoo y Kei hablaban de lo mucho que odiaban
los profesores mientras Yamada solo rezaba porque aún no se acabaran los
panes rellenos de fresa.
Entraron formándose nuevamente
tras esa larga fila, esperando por su turno cada uno metido en su plática.
-Ya viste quien viene allí, es el
príncipe
Dijo Chinen emocionado, Yamada
miro al menor extrañado.
-Porque te emocionas por alguien
tan falso.
-eh, porque dices eso?
Yamada reacciono a lo que había
dicho, recordando las palabras del alto, no quería meterse en problemas.
-no por nada, lo siento estaba
distraído..
-no es verdad dijiste que el
príncipe era un falso, ¿porque?
-Si porque, Ryosuke-kun dices eso
de mí?
Una voz familiar tras ellos se escuchó,
Yamada se tensó al escuchar a quien menos quería ver en esos momentos.
-yo…
-Oh, es verdad debes decir eso,
porque aún no anuncio oficialmente lo nuestro no es así.
-eh?
-Oigan todos, quiero anunciarles
que este chico Yamada Ryosuke, de primer año que cursa en la clase B, es
oficialmente mi novio, así que espero lo respeten igual a mí, gracias por su
atención.
Anuncio Yuto con esa amabilidad
de siempre, al instante que abrazaba por la espalda al mayor, quien se quedó sin
aliento al escuchar tal locura, pronto comenzaron los murmullos al igual que
las malas miradas, otras decepcionadas y tristes, al igual que también habían
otras que se alegraban por la felicidad de su príncipe, Chinen y Kei miraban
confundidos a Yamada quien aún no reaccionaba, se había quedado mudo.
Cuando por fin logro reaccionar,
se iba alejar de Yuto de no ser porque este lo tomo de brazo y lo saco de todo
ese alboroto que se formó.
-E… espera que haces?, suéltame.
Alego Ryosuke tratando de zafarse
del agarre, Yuto solo sonrió ladino sin siquiera prestarle atención siguió
arrastrándolo, hasta que llego a donde se encontraba Yuto el día anterior.
-porque dijiste eso?
-hmmm, te lo advertí… dije que no
quería que siquiera trataras de manchar mi nombre, y lo hiciste llamándome
falso, no crees que eso es muy cruel de tu parte, pequeño idiota.
Respondió con esa amabilidad
falsa, Yamada trago saliva.
-lo siento… no volverá a suceder
pero por favor, no me hagas daño… yo vengo a este colegio porque en verdad quiero
acabar una carrera para ayudar a mis padre, mi economía no es la mejor, estoy
aquí solo por una beca que me fue otorgada. No hagas algo que me perjudique por
favor.
-Ya sabía todo eso, te mande a
investigar.
-Eh?... entonces porque dijiste
lo de hace un rato
Pregunto el mayor con temor, Yuto
solo sonrió delineando la mejilla del bajito.
-no creerás que es porque me
gustas, solo que con eso te mantendré más vigilado, serás como mi perro. En
pocas palabras me servirás y me serás leal.
-que? Pero… acaso estás loco, soy
chico!
-y acaso no has oído hablar que
en el amor no se manda, ja ja ja que idiotez, en fin no me importa lo que digas
ya está decidido.
-NO! No lo hare.
-Solo recuerda, que soy el hijo
del dueño… las consecuencias podrían ser fatales.
Rio con burla y sin decir más se alejó,
dejando a un furioso Ryosuke, saco un leve suspiro conteniendo esas ganas de
llorar a la vez por impotencia y rabia al no poder hacer nada.
****
-valla, Yuto ahora si me
sorprendiste jamás pensé que harías algo así, no sabes cuantos corazones
rompiste, pobre de ese chico se acaba de ganar muchas enemistades.
Dijo Yuya con burla, Yuto solo sonrió
ladino.
-él se lo gano. Ni siquiera yo
mismo aun entiendo porque dije que era mi novio fue lo único que se me vino a
la mente, sin en cambio no voy a negarte que ese chico me interesa.
-uy, huele a que te gusta? Ja ja
ja el gran Nakajima Yuto se está enamorando?
-no digas idioteces, solo que hay
algo de él que me llama la atención, me gusta molestarlo.
Sonrió con malicia, Yuya solo lo
miro sonriendo.
****
Yamada caminaba por los
alrededores del colegio, ya no deseaba regresar a clases no deseaba ser
interrogado nuevamente por Chinen o cualquiera de sus compañeros, como fue que
se había metido en eso ni el mismo ya quería recordarlo, odiaba a ese tonto.
-Ryosuke…
-eh? Kei… que haces aquí, se
supone deberías estar en clase
-no podía entrar, estoy demasiado
preocupado por ti, es verdad lo que dijo Nakajima.
-eh…? … si.
-mientes, si fuera cierto no
estarías así. ¿Qué paso? Porque dijo eso, dime somos amigos!.
Ryosuke solo bajo la mirada y
abrazo a Kei, quien correspondió protectoramente.
-tienes razón la verdad no es
esa, Nakajima esta…
-Ryosuke-kun!.. no crees que
abrazarse con otro, es lo peor que puedes hacer, eres mi novio y soy demasiado
celoso..
Interrumpió Yuto dirigiéndose
hacia ellos, al momento que apartaba a Ryosuke de Kei, este lo miro con enfado.
-basta! Ryosuke no es un objeto,
y mucho menos es tuyo, no solo porque tienes el poder en esta escuela puedes
abusar de quien te plazca!
Grito Kei con coraje, Yamada solo
lo veía con asombro y temor, no deseaba
tener más problemas y mucho menos que Inoo saliera perjudicado.
-pero si Yamada lo..
-Kei! Basta Yuto es mi novio, me
gusta y quiero intentarlo con él.
Interrumpió Yamada a Yuto quien
se quedó sorprendido, Kei lo miro con incredulidad.
-Ya viste, no hay nada que
ocultar.
Dijo Yuto con una sonrisa
satisfactoria, al momento que depositaba un beso en la mejilla el bajito
dejándolo ruborizado, tomo la mano de este y se lo llevó lejos de Kei, quien se
quedó temblando de ira y coraje.
-yo me encargare de que te alejes
de Ryosuke, lo juro.
Yuto sostenía la mano de Yamada
con fuerza, y nuevamente un recuerdo apareció en su mente.
“-eto………Yama chan me gustas mucho.”
-porque haces cosas que me
molestan?
Hablo Yuto sacándolo nuevamente
de ese trance que se había metido.
-eh… es mi amigo, no puedo
mentirle.
-No solo me refiero a eso, no me
gusta que abrases a otro, no quiero que haiga murmullo de que me engañas.
Respondió Yuto con fastidio,
Yamada solo bajo la mirada obvio para el alto, solo le importa que dijeran
sobre él.
-prometo tener más cuidado.
-eso espero, porque ahora me
perteneces.
***
Así transcurrió rápidamente más
de una semana, Yamada se acostumbró a los caprichos de Yuto a servirle cuando
le mandara, a lo constantes acercamientos que solía tener cuando estaban cerca
de alumnos, a los malos y buenos comentarios sobre él, pero más que nada
aquellos recuerdos que lo atormentaba cada vez más, pero solo ocurrían con más
frecuencia cuando tenía mucho acercamiento con el alto.
Se dirigía hacia el colegio con
la mirada perdida, hasta que una vocecita lo saco de ellos.
-Yama-chan! Ohayou.
-Buenos Días Chinen.
-Hace mucho que ya no platicamos,
desde que eres novio de Nakajima.
-ah… lo siento..
-no hay problema, pero ay algo
que siempre quise decirte ¿puedo hacerlo ahora? Anda será rápido.
Pidió Chinen con suplica, Yamada
lo miro extrañado y solo acepto a seguirlo, Yuto que buscaba a
Ryosuke logro
ver como este se iba con el menor, con molestia se dedicó a seguirlos.
-y bien que me querías decir?
Pregunto Yamada deteniéndose,
Chinen se puso frente a él, ruborizado.
-es que yo… desde que te vi, me
atrajo algo en ti me gustaste, y no solo eso yo estoy enamorado de ti..
-eh?
-me gustas mucho.
Dijo el pequeño acercándose a
Yamada para besarlo, Ryosuke no pudo reaccionar las palabras del menor habían
sido tan claras-
-parece pequeño, que aún no
entiendes que Ryosuke es mi novio,
Interrumpió Yuto colocando su
brazo con rapidez antes que siquiera Chinen se acercara otro centímetro más a
los labios del mayor.
-Yuto..
-eh..
-Ryosuke es mío, no lo entiendes?
Replico Yuto con amabilidad, al
momento que se giraba tomando al bajito por el mentón y depositaba un beso,
dejando a un total Ryosuke en shock, reflejándose en su mente nuevamente ese recuerdo
que ahora fue claro, logro ver por fin el rostro de aquel chico, era Yuto..
Continuara…
